a. G
Entre balas y desprecio solo mírame
ignoremos las calles y los nudos de sangre que la gente llora.
Eres la única esmeralda
en este país donde solo tus ojos no me duelen
donde solo en tus brazos me libero
de una violencia a la que somos esclavos.
Solo en ti no escucho las extremidades huérfanas
ni las avenidas bañadas con el licor ajeno
mientras la flor nocturna se marchita en las esquinas.
Tan solo mírame
e ignoremos la caricatura del tiempo.
Porque solo tú eres mi único calendario
solo tú la hoja seca que florece en el invierno
como niño que no crece, pero vive.
Aunque la gente me llame egoísta por quererte
déjame acariciar el polen guardado entre tus piernas
… Y gritar entre esqueletos que aquí todo es hermoso
porque otra vez he descubierto el código de tu cuerpo.
Dic 2009.
Katheryn Rivera.